Investigadores del Instituto de Ciencias de la BUAP han descubierto la presencia de metales pesados en el material particulado del polvo urbano de la ciudad de Puebla. Este hallazgo pone de manifiesto la preocupación por los efectos nocivos que estos contaminantes pueden tener en la salud humana.
Composición del material particulado y sus fuentes
En su investigación, los doctores María Guadalupe Tenorio Arvide y Miguel Santoyo Martínez, junto con el doctor Francisco Bautista Zúñiga de la UNAM, han identificado diminutas partículas de cromo, cobre, hierro, plomo, titanio, estaño, zinc y vanadio en el polvo de las calles. Según Tenorio Arvide, estas partículas provienen principalmente del desgaste automotriz, que incluye componentes como balatas y emisiones del escape. Estas partículas son tan pequeñas, con un tamaño inferior a 10 micrómetros, que pueden ser inhaladas o ingeridas fácilmente por las personas.
Riesgos para la salud derivados de la exposición a metales pesados
El material particulado en el aire está asociado a una variedad de problemas de salud. Los estudios indican que la exposición prolongada a estas partículas contaminantes puede provocar infecciones en la nariz y garganta, así como daños en el sistema cardiovascular. Además, se ha relacionado con enfermedades genotóxicas y cancerígenas. La Organización Mundial de la Salud estima que anualmente mueren 7 millones de personas a causa de enfermedades vinculadas a la contaminación ambiental, especialmente por factores industriales y el flujo vehicular.
La situación actual del parque vehicular en Puebla
En Puebla, según datos del INEGI, el parque vehicular en 2021 superó el millón 209 mil unidades, incluyendo automóviles, motocicletas y camiones. Este incremento en la circulación de vehículos se traduce en un aumento de las partículas de metales pesados presentes en el polvo urbano en los últimos años.
Resultados del análisis y próximos pasos en la investigación
En los análisis realizados, se encontró una concentración promedio de cromo de 143 miligramos por kilogramo en el polvo de las calles, lo que representa una de las mayores preocupaciones para la salud pública. Los centros educativos fueron identificados como áreas con una mayor acumulación de este tipo de polvo, lo que plantea un riesgo adicional para los estudiantes y el personal educativo.
La doctora Tenorio Arvide, quien posee un doctorado en Ciencias Ambientales, ha decidido enfocar el estudio en la genotoxicidad y el daño genético que puede causar este material particulado en plantas ubicadas en los camellones de la ciudad. Además, se planea extender el análisis a áreas rurales para obtener una comprensión más amplia del impacto de estos contaminantes.
Con este estudio, se busca crear conciencia sobre la necesidad de abordar la contaminación ambiental en Puebla y sus implicaciones para la salud pública.